La terapia de microcorriente emplea una baja amplitud de electricidad que está en línea con la actividad eléctrica de las células del cuerpo. La microcorriente tiene un amplio potencial terapéutico, fomentando la curación y mejorando el dolor en diversas condiciones de salud.
¿Qué condiciones ayuda a tratar?
Dolor de espalda
Dolor de cabeza
Dolor de rodilla
Codo de tenista
Dolor en la articulación temporomandibular
Dolor sinusal
¿Cómo funciona?
Las microcorrientes utilizan electricidad con una baja amplitud y frecuencias de 0.5-10Hz. Estas combinaciones de frecuencia y amplitud están estrechamente alineadas con la actividad eléctrica de las células del cuerpo. La terapia de microcorriente ayuda a sanar heridas, reparar lesiones, mejorar la recuperación postquirúrgica, aumentar la energía y aliviar el dolor asociado con la artritis, la fibromialgia y otras condiciones dolorosas. Además, la investigación ha demostrado que el tratamiento con microcorrientes puede ayudar a prevenir la pérdida muscular y preservar la función muscular.
¿Cómo se siente?
El tratamiento con microcorriente puede sentirse apenas o no sentirse en absoluto. A diferencia del TENS, no habrá tensión ni espasmos en los músculos del área de tratamiento.
¿Qué tan rápido veré resultados?
El número de sesiones necesarias varía según el individuo y la condición específica que se esté tratando. Algunos pacientes pueden sentir alivio después de una sola sesión, mientras que otros pueden necesitar múltiples tratamientos para lograr resultados óptimos. Su profesional trabajará con usted para desarrollar un plan de tratamiento personalizado basado en sus necesidades y progreso.
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